CURA TU INTESTINO, SANA TU MENTE
La depresión puede comenzar
con un intestino permeable;
He aquí cómo
Sería una tontería creer que la depresión se puede superar con una única solución.
Pero para algunas personas, la luz al final del túnel brilla en un lugar muy sorprendente. Ciertamente lo hizo por mi...
Curar mi depresión vino con la curación de mi tracto gastrointestinal:
mi intestino
Cuando me convertí en un estudiante de nutrición en 1992, tenía mucha curación que hacer. Tuve un infierno de intestino irritable. Ningún tratamiento había funcionado: ni la medicina no convencional, ni cosas realmente extravagantes.
Lo que descubrí, como estudiante, fue que tenía algo llamado "intestino permeable". Eso dio lugar a mucha hilaridad.
El término intestino permeable evoca una caricaturesca imagen de pseudociencia. Pero cuando se le da su nomenclatura científica, "permeabilidad intestinal", la idea inmediatamente gana credibilidad.
Además, la evidencia científica de la asociación entre la salud intestinal y la salud cerebral es fuerte y cobra impulso.
¿Qué es un intestino permeable? ¿Cómo puede llevar a la depresión?
Tu intestino hace mucho más que simplemente digerir tu comida y extraer lo utilizable de ella. Forma una barrera protectora entre tu interior y el mundo externo.
Pero el sistema tiene una debilidad.
Esta barrera, el revestimiento intestinal, consiste en una sola capa de células, llamada epitelio. Las células de esta capa frágil se mantienen juntas por proteínas llamadas "uniones estrechas".
Al igual que los porteros que cuidan cuidadosamente sus entrañas, estas uniones estrechas filtran elementos indeseables y bloquean su entrada.
En circunstancias normales, a los alborotadores se les da tratamiento corto y son expulsados del intestino de la manera normal. Estos incluyen toxinas, partículas de alimentos no digeridos, insectos microscópicos y otros cuerpos extraños que han encontrado su camino a través de su comida y bebida.
Desafortunadamente, es fácil dañar el epitelio, dejándolo con goteras. Aparecen orificios microscópicos y las uniones apretadas comienzan a aflojarse.
Para que toda la variedad de suciedad sea capaz de cruzar a tu torrente sanguíneo, es como tener un pase de acceso completo para el resto de tu cuerpo.
Fuente: Pixabay
Se produce el caos, y no es bonito.
Como era de esperar, los síntomas de un intestino permeable pueden aparecer en cualquier lugar, desde el intestino hasta las articulaciones, desde la piel hasta el cerebro.
Yo era una prueba de eso. Durante 15 años, viví con dolor abdominal diario, a menudo insoportable, acompañado de una gran inflamación y exceso de gases.
Pude haber vivido con todo eso. Pero como adulto joven sensible, podría haberlo hecho sin las imperfecciones, las que afortunadamente no estaban en mi cara.
Pero mi pecho y mi espalda estaban salpicados. Era muy cohibido y solo vestía ropas que cubrían esas áreas. Los veranos pueden ser muy problemáticos.
Parte del problema es, y ciertamente lo fue, para mí, la sobrecarga tóxica.
El hígado generalmente se adapta bien a las toxinas cotidianas del cuerpo, pero cuando la carga excede la capacidad, es descargada en otro lugar. En mi caso, fue en la piel.
Diferentes personas experimentan diferentes síntomas. Hay muchas condiciones asociadas con un intestino que ha perdido su integridad y se vuelve poroso, incluyendo,
trastorno intestinal inflamatorio
enfermedad celíaca
artritis
eczema
acné
Los científicos han agregado recientemente la depresión a esa lista.
El vínculo entre la depresión y el intestino permeable es la inflamación, y la inflamación es una de las características clave de la permeabilidad intestinal. Es en gran parte creado por bacterias.
Las bacterias pertenecen al intestino, donde normalmente permanecen o se mueven. Pero cuando el intestino tiene filtraciones, éstas pueden cruzar al torrente sanguíneo (un proceso conocido como "translocación de bacterias"), donde liberan una sustancia tóxica llamada endotoxina.
Esta endotoxina pone en movimiento una respuesta inmune. Esta respuesta incluye la producción de proteínas inflamatorias llamadas citoquinas y una sustancia llamada lipopolisacárido (LPS).
Existe una evidencia creciente de que las citoquinas y los LPS pueden desencadenar una depresión mayor (MDD), también conocida como depresión clínica.
Tanto es así que en 2008 los investigadores belgas concluyeron, en un estudio publicado en la revista Neuroendocrinology Letters, que:
"Los pacientes con MDD (por sus siglas en inglés) deben ser revisados para ver si tienen filtración del intestino".
Desde entonces, la investigación sobre el vínculo entre la inflamación intestinal y la depresión ha continuado.
Según los datos de la Encuesta Nacional de Examen de Salud y Nutrición, un extraordinario 47% de las personas con depresión clínica también han "acrecentado" la inflamación.
¿Cómo tiene la inflamación este efecto?
Las citocinas pueden desencadenar la depresión alterando la actividad que controlan el estado de ánimoen las regiones del cerebro.
También causan daños en esas regiones. Esto puede provocar sentimientos de negatividad y fatiga, un efecto que también se ha observado en la terapia contra el cáncer.
La citocina se usa para tratar algunos tipos de cáncer e infecciones virales, y puede desencadenar la aparición de depresión mayor en hasta el 45% de los pacientes.
